¡Se acabó el colegio! El verano amenaza con varios meses por delante con los niños a cuestas, por lo que toca planear actividades para distraer y hacer disfrutar a los más pequeños. Y en todo verano que se precie no pueden faltar los días de playa, algo que gusta tanto a niños como a adultos por la cantidad de actividades que se pueden realizar. Pasear por la orilla, bañarte en el mar, hacer un picnic, jugar con pelotas o cartas, hacer castillos de arena, coger conchas de moluscos… ¡ya puedes hacerlo realidad!
Hay elementos básicos para un día de playa con niños que no debes olvidar, como toallas, sombrillas y los trajes de baño infantiles. Pero organizar una jornada playera con los más pequeños es un trabajo arduo. Imagínate que te olvidas algo fundamental y se pasan todo el día llorando enfadados, ¡ni pensarlo! O resulta que la playa que has elegido no es la apropiada, sin suficiente espacio y te toca volver con los niños a casa. Para evitar este tipo de imprevistos, te recomendamos hacer una lista con el itinerario y todo lo que puedas necesitar.
En este post podrás leer:
El checklist para ir a la playa con niños este verano
Toma nota de estos prácticos consejos para que planifiques un buen día en familia y no te olvides de ningún detalle:
1. Elige bien el sitio
Si vas a la piscina no vas a tener muchos problemas porque todas tienen un área infantil, pero si decides ir a la playa con niños debes elegir una familiar, amplia, con accesos señalados y que tenga poco oleaje y profundidad para que los pequeños jueguen en el agua.
2. Protección solar
Es muy importante proteger la piel de los niños porque es muy fina y pasan la mayor parte del día al sol. Usa una crema solar con cobertura de 50+ y, además, puedes adquirir una específica para la cara, sobre todo, para aplicar en las horas de más calor: entre las 12:00 y las 16:00 horas.
3. Organizadores prácticos y manejables
Los niños necesitan sus juguetes y a eso hay que sumar todos los accesorios para la playa y para el picnic. Usa sacos que se pueden doblar y plegar en un bolsillo y utensilios multiusos para ganar en espacio.
4. Ropa para los niños
No está de más que lleves varios trajes de baño infantiles así como varias mudas. Si no es porque se mancha o rompe, lo usarás para cambiarlo de vuelta a casa. Encontrarás modelos preciosos, con estampados divertidos o sus dibujos preferidos, en la colección de ropa infantil para el verano 2017 que puedes encontrar en tiendas online como Parruliños.
Otra recomendación es que compres también camisetas que bloquean los rayos solares y se pueden colocar encima del traje de baño de los niños. Y, por supuesto, no deben faltar una gorra con visera o un gorrito y unas chanclas o sandalias de goma para que puedan andar sin quemarse y bañarse sin hacerse daño (y otras de repuesto para evitar llenar el coche y la casa de arena).
5. Flotador y colchoneta
Asegúrate de que sea seguro, cómodo y de pequeñas dimensiones ya que tanto en las piscinas como en las playas se suelen llenar de estos accesorios y puedes tener problemas. También los hay con una pequeña piscina incorporada para que el niño se divierta en la arena. Y para ganar en seguridad, nada mejor que los chalecos hinchables: cómodos, ligeros y con diseños divertidos como los de los trajes de baño infantiles.
6. Sombrilla y tumbona
Disfrutar del calor continuo en verano sin protección es muy peligroso y vas a necesitar descansar entre chapuzón y chapuzón, así que tampoco te olvides de llevar suficientes toallas, sombreros y gorras para toda la familia.
7. Botiquín de primeros auxilios
Sabemos que los niños no paran de jugar y no son precisamente cuidadosos. Intenta que el botiquín cubra lo básico: tiritas resistentes al agua, gasas, mercromina, analgésicos… Si necesitas ayuda, acércate al puesto de los socorristas y profesionales sanitarios, pero recuerda que siempre vale más prevenir que curar.
8. Hidratación máxima
En un día de playa con el agua salada y el calor como protagonistas vas a necesitar beber mucho líquido y te apetecerá comer algo fresquito y ligero. No te olvides de llevar una nevera portátil con bebida fría y platos preparados para comer: fruta, sándwiches, ensaladas, bocadillos, zumos o refrescos.
Y con todas estas buenas recomendaciones ya puedes pensar en disfrutar de un día de descanso y diversión en la playa con toda la familia y la conciencia tranquila gracias a tu buena planificación.
¡Feliz verano!